- Aceite de oliva 3-4 cucharadas
- Ajo 1 diente
- Cebolla blanca 1/2
- Guindilla roja fresca 1
- Pimienta
- Queso Provola 150 gr
- Queso pecorino rallado 70 gr
- Sal
- Salchicha 250 gr
- Semillas de hinojo 1 cucharadita
- Vino tinto 1 vaso
- ñoquis sardos 350 gr
En una sartén antiadherente grande aromatizar al aceite con el ajo y la guindilla pelada y picada. Añadir la cebolla blanca cortada en rodajas finas y rehogarla añadiendo un poco de agua caliente, si fuera necesario. Incorporar las semillas de hinojo y tostarlas durante un minuto, removiendo, luego añadir la salchicha sin la tripa, previamente desgranada. Saltear hasta que cambie de color. Rociar con el vino y dejar que evapore a fuego fuerte, verter el puré de tomate en la sartén, sazonar con sal y pimienta y añadir un cucharón de agua. Llevar a ebullición, tapar y bajar el fuego. Continuar la cocción unos 30 minutos más.
Cocer los ñoquis en agua hirviendo salada y escurrirlos muy al dente. Pasarlos a un bol junto con el condimento preparado, el queso pecorino rallado y la mitad del queso provola cortado en dados. Mezclar y llevar a una fuente para horno untada con mantequilla alternando la pasta con el queso provola restante. Espolvorear con más queso pecorino y cocer en el horno precalentado a 200° durante aproximadamente 20 minutos. Retirar del horno, dejar reposar unos minutos, luego servir.